En nuestra experiencia “Paisajes emocionales, Paisajes conscientes” conectamos con la naturaleza a través de las emociones. El paisaje posee muchas cualidades sensoriales que necesitamos para apreciar el territorio en toda su riqueza y complejidad, para mejorar nuestra salud y para alcanzar el bienestar físico y mental. Todas las experiencias se desarrollan en espacios naturales de gran interés paisajístico, biológico y geológico. Comunicamos los valores del entorno a través de la interpretación y nos conectamos a las emociones con las actividades que desarrollamos para crear un vínculo intenso con el lugar. “Paisajes emocionales, Paisajes conscientes” se compone de un programa con tres actividades que se realizan de forma separada en distintos días o bien se pueden combinar en un mismo día: 1. Baños de bosque para la salud. 2. Mares para la mente. 3. Atardeceres en el mar. Contacta para coordinar cómo prefieres disfrutarlas, si las tres juntas o solo dos de ellas en un mismo día o bien en jornadas diferentes pero beneficiándote del precio del paquete. Información adicional. Programa: 1. Baños de bosque para la salud: es una experiencia sensorial para cuidar la salud física y mental. Aumenta el bienestar y el estrés desaparece al conectar con la naturaleza, experimentando un paseo consciente guiado en un entorno natural para despertar los sentidos. Se reconecta con el mundo natural y con uno mismo. La actividad se inicia con una interpretación del paisaje y de sus valores. La duración aproximada de la actividad está entre las dos y tres horas, caminando una distancia menor de un kilómetro por terrenos llanos o de pendiente suave, fácilmente accesibles. Los beneficios son, entre otros, el fortalecimiento del sistema inmunológico, disminución de la presión arterial, frecuencia cardíaca y hormona del estrés (cortisol). Sensación perceptible de relajación, claridad mental. Mejora estados de ansiedad y depresión. Durante la actividad se invita a los participantes a una infusión relajante. 2. Mares para la mente: De forma guiada por una terapeuta transpersonal y facilitadora de educación de las emociones se realiza una observación consciente que acompaña el reconocimiento de las emociones de los participantes a través de los movimientos del mar y de los elementos naturales costeros. El ser humano vive los desafíos de la vida experimentando emociones, construyendo a partir de ellas un complejo mundo psi?quico que se va a expresar en conductas. Estar cerca del mar nos llena de paz interior, ayuda a calmar nuestro estado de ánimo, a relajarnos y sentir una mayor satisfacción e, incluso, a ser más creativos. La brisa marina está cargada de iones negativos que benefician enormemente a nuestro organismo, favorecen la renovación celular, restablecen el equilibrio nervioso y estimulan la producción de serotonina, la hormona de la felicidad, proporcionándonos así una enorme sensación de bienestar. La duración aproximada de la actividad está entre las dos y tres horas, caminando pequeñas distancias por playas y acantilados. Durante la actividad se invita a los participantes a una infusión relajante. 3. Atardeceres en el mar: El cerebro necesita emocionarse para aprender y pocas cosas nos emocionan tanto como un atardecer, aún más si es desde el mar. Los atardeceres, nos impactan, creando emociones dentro de nosotros. Eso se debe a que la luz del sol en el atardecer actúa directamente sobre algunas áreas específicas de nuestro cerebro encargadas de procesar las emociones, más concretamente, las positivas. Acompañados por un guía especializado en educación ambiental y patrón de barco, salimos con rumbo oeste, siguiendo al Sol, una hora antes del atardecer para atravesar la bahía y alcanzar mar abierto. Durante la ruta en barco el paisaje es el protagonista, se interpreta el Espacio Natural Protegido de la Bahía de Santander, el Estuario del Miera (con mención especial al proyecto de recuperación del águila pescadora) y Las Dunas del Puntal, hasta alcanzar la isla de Mouro, y las costas del Geoparque Aspirante Costa Quebrada, lugares incluidos en la Red Natura 2000 que nos permite hablar de los avatares que cambiaron la historia de la Tierra, los procesos que han dado lugar al paisaje de nuestro presente, y la acción humana que lo ha modelado. La fotografía al atardecer desde el barco será la forma perfecta de plasmar la belleza y las emociones que nos han hecho sentir estos paisajes.