Recursos encontrados

Flora y Fauna

Refugio de vida

Refugio de vida

FLORA

El Valle de Iruelas es una de las joyas naturales que alberga la Sierra de Gredos.

 

Uno de los aspectos más llamativos de Iruelas es la variación altitudinal tan brusca que presenta, que hace que se pase en apenas 10 kms desde las comunidades mediterráneas adaptadas a la sequía de la zona de Las Cruceras, repleta de preciosos enebros intercalados en los bolos graníticos (a 740 m de altitud), a las zonas cumbreras de piornales y cambrionales (casi 2000 m).

 

La rápida sucesión de los pisos de vegetación que se puede apreciar en este valle remata con los pastizales y piornales de altura, en donde el endémico cambrión (Echinospartum barnadessi) se entremezcla con piornos (Cytisus oromediterraneus) y alguna que otra manzanilla de Gredos (Santolina oblongifolia). Aparte de algunas repoblaciones de pino albar, el siguiente elemento de interés según descendemos en altitud son los impresionantes ejemplares de pinos cascalbo (Pinus nigra) y pino de Valsaín o silvestre (P. sylvestris) que aparecen salpicados aquí y allá en torno a los 1500 m. Lo vetusto de algunos ejemplares se aprecia en la copa aplanada de su extremo, que forma una especie de corona, frecuentemente utilizada por los buitres negros para emplazar sus nidos.

 

En cuotas más bajas aparece el elemento paisajístico más llamativo del Valle de Iruelas: sus imponentes bosques de pino resinero o negral (P.pinaster).

Si resultan llamativos estos pinares de resinero, no los son menos, los bosquecillos de robles (Quercus pyrenaica) compuestos por algunas decenas de ejemplares bien conformados, de porte robusto, y sin huellas de podas, cosa bastante infrecuente en el centro de la Península.

Ya en las cotas basales del valle (en torno a los 850 m) las condiciones más secas y cálidas del ambiente se traducen botánicamente en la sustitución de las anteriores especies por otras mejores adaptadas a estas condiciones: encinas (Q.ilex subsp. ballota) y sobre todo, enebros (Juniperus oxycedrus) cubren ahora las ya más suaves laderas que acaban por tocar el embalse de El Burguillo.

 

Otra nota de interés geobotánico son los bosques de galería que corren pegado a los cursos de agua por todas las gargantas. Entre un punto y otro del Valle, entre las cumbres y la ribera del Alberche (casi 1300 m de desnivel) hemos dejado innumerables arbolillos que hacen más amena la cobertura arbórea del valle: interesantísimos rodales de olmo de montaña (la población más numerosa del centro peninsular), de tejos y de acebos, serbales y algunos abedules. Los matorrales son aún más diversos si cabe: piornales, cambrionales, retamares, jarales, cantuesares…

 

Dentro de la Reserva Natural del Valle de Iruelas también se encuentra otra joya botánica: “El Castañar de El Tiemblo”, que es la mejor y más extensa manifestación de castañar del Sistema Central. El aspecto típico de este castañar es el típico de un bosque eurosiberiano.

Flora de la Reserva Natural Valle de Iruelas
Flora de la Reserva Natural Valle de Iruelas, arbol

FAUNA

El Valle de Iruelas alberga la mayor colonia de Buitre negro de Castilla y León con unas 150 parejas aproximadamente.  Es una de las colonias más importantes de España.   El otro protagonista destacado es el Águila imperial, especie en peligro de extinción, que suele nidificar todos los años en el Valle. Al ser imposible enumerar aquí la rica y diversificada fauna de Iruelas, destacamos algunas de las más notables o fáciles de observar.  En ambientes forestales encontramos especies de aves como el picogordo, piquituerto, el águila real, azor, reyezuelo listado, arrendajo, trepador azul, pico picapinos, oropéndola…, en zonas arbustivas de menor altitud es fácil de ver el carbonero común, el herrerillo, el verdecillo, la curruca capirotada, el mito, el rabilargo, la tarabilla común... Los mamíferos presentes en este ambiente son el jabalí, zorro, ardilla, garduña, ciervo y el corzo. En la Garganta de Iruelas y su entorno es fácil observar al mirlo acuático, la lavandera cascadeña, el lagarto verdinegro, la rana patilarga y el tritón ibérico. En las pistas forestales y carreteras de la Reserva Natural suelen estar calentándose al sol para poner incrementar su actividad, ofidios como la culebra bastarda, la culebra de herradura, la culebra viperina y la culebra de escalera y reptiles como el lagarto ocelado y la lagartija colilarga.

Utilizamos cookies para asegurarnos de brindarnos la mejor experiencia en nuestro sitio web. Si continúas utilizando este sitio, asumiremos que estás de acuerdo con ello.