La combinación perfecta de monumentos naturales y arquitectónicos
Las Hoces del Río Riaza es un destino muy apropiado para los amantes de la naturaleza y la historia. Dentro de él, se encuentra el Parque natural Hoces del río Riaza cuya zona de influencia socioeconómica está compuesta por tres encantadores municipios que no solo ofrece paisajes impresionantes, sino también una riqueza cultural que cautiva a sus visitantes.
Explorar este lugar es hacer un viaje en el tiempo, donde existen antiguas ruinas, iglesias centenarias y pintorescas calles empedradas que cuentan la historia de generaciones pasadas.
Además, la variedad de actividades que se pueden realizar al aire libre son numerosas, desde senderismo y observación de aves hasta rutas en piragua por el Embalse de Linares
Las Hoces del Río Riaza posee una gran biodiversidad. Por eso, es un destino idóneo para todos aquellos que buscan la unión de la naturaleza y la cultura en un mismo lugar.
Comencemos nuestro viaje por Maderuelo, un pueblo con historia en cada calle. Declarado conjunto histórico en 1993, Maderuelo guarda tesoros como la Ermita de la Veracruz, monumento nacional desde 1914. Este municipio resalta por sus monumentos románicos tardíos, como el castillo, las murallas, su puerta fortificada y sus dos iglesias románicas
El imponente castillo de Maderuelo en lo alto del pueblo, ofrece unas vistas panorámicas que te dejan sin palabras. Construido en el siglo XI, este castillo ha sido testigo de innumerables batallas y ha sobrevivido al paso del tiempo como un símbolo de la fortaleza y resistencia del pueblo.
Las murallas de Maderuelo, que rodean el casco antiguo, son otro vestigio de su pasado medieval. Construidas para proteger el pueblo de los ataques enemigos, estas murallas son un recordatorio de la importancia estratégica de Maderuelo en la historia de la región.
En Maderuelo se esconden dos iglesias románicas dignas de admirar. Desde la imponente iglesia de San Miguel, reconstruida en 1981 después de años de abandono, hasta la encantadora iglesia de Santa María del Castillo que esconde un enigma. En ella se encuentra una momia, se trata del cuerpo de una niña de procedencia desconocida, se dice que pertenecía a la nobleza de 1861 y actualmente está protegida por un cristal.
Debajo de la iglesia de Santa María del Castillo encontraras el mirador de Alcarcer donde se encuentra una réplica de una catapulta medieval.
No puedes olvidarte de visitar la Puerta del Barrio, el Arco y Puerta de Entrada a la Villa, el Mirador de los Templarios, la Ermita de Castroboda, el Puente Romano- Medieval sumergido y el Torreón del Castillo.
Las rutas como "La Rivilla y Senda Larga" ofrecen experiencias inolvidables para los amantes del senderismo. En cuanto a su gastronomía tradicional el cocido y el cordero asado son sus platos estrella.
Te animamos a venir en las fiestas de la semana cultural de verano, ya que es una oportunidad única para vivir la auténtica esencia de Maderuelo. Además, en verano Maderuelo se llena de familias disfrutando de días al aire libre junto al embalse de Linares del Arroyo un espacio digno de disfrutar.
En Valdevacas de Montejo, la historia y la tradición se entrelazan en cada rincón del pueblo. Desde la imponente Casa Consistorial hasta la Iglesia de San Cristóbal, cada edificio cuenta una historia. También debes visitar la Antigua Fragua, el Antiguo Lavadero, la fuente del Cierzo, el Castillo de Robledo y la Ermita de Nuestra Señora del Rosario.
Si te gusta hacer senderismo la ruta de los miradores y la ruta de los molinos ofrecen vistas panorámicas que desprenden tranquilidad plena.
Durante la primera semana de agosto, las calles se llenan de vida y color con las festividades de la semana cultural de verano, donde la música, el baile y la gastronomía local son los protagonistas indiscutibles.
Montejo de la Vega de la Serrezuela, deslumbra con su belleza natural y su patrimonio histórico. La iglesia de San Andrés, la Fuente de la Pisadera y la Ermita Virgen del Val inaugurada en el año 1905, se tratan de lugares que guardan un pasado lleno de historia. El puente grande, construido en el siglo XVIII durante la época de Carlos III, es un testimonio de la ingeniería y la perseverancia humana que ha resistido el paso de los siglos.
Si te gusta los edificios eclesiásticos tienes que hacer una parada en la Iglesia del Monasterio de San Martín del Casuar y la Ermita de Causar, iglesia románica del SXII esta parcialmente en ruinas, y fue declarada monumento de interés cultural en 1997, fue de los primeros monasterios que se conocieron al sur de Duero.
Pero lo más impresionante de Montejo de la Vega de la Serrezuela es su naturaleza salvaje. Aquí se encuentra la mayor colonia de Buitre Leonado de Europa, ofreciendo a los visitantes la oportunidad única de contemplar a estas magníficas aves en su hábitat natural. Además, cuentan con el refugio de aves rapaces, inaugurado en 1975 gracias a la iniciativa de Félix Rodríguez de la Fuente, se trata de un santuario para los amantes de la ornitología y la conservación de la fauna silvestre.