Los vecinos y vecinas de Urdaibai te recomiendan
Distintos puntos de interés para explorar esta zona de la región de Bizkaia.
La Casa de Juntas y el Árbol de Gernika forman un conjunto monumental declarado Bien de Interés Cultural, y sobre todo, son un símbolo de la historia de Bizkaia y Euskadi.
El corazón del conjunto es el Árbol de Gernika; este roble es el símbolo más universal de todos los vascos y acoge importantes actos, como la toma de posesión y el juramento del Lehendakari y del Diputado General de Bizkaia. El actual árbol de Gernika se plantó en el año 2014, y todos han sido retoños del primer Árbol de Gernika del que se guarda memoria.
En el jardín de la Casa de Juntas también se encuentra el denominado Árbol Viejo, aunque no es el primero de todos los Árboles de Gernika, es el resto más antiguo que se conserva.
La Casa de Juntas es un edificio de estilo neoclásico, que se construyó entre 1826 y 1833 bajo la dirección del arquitecto Antonio de Etxebarria. Hasta su construcción, las juntas se celebraban en la ermita de Santa María de la Antigua, demolida para acometer la construcción del edificio actual
Aquí te atrapará el mundo mágico que creó el artista Agustín Ibarrola. Pinturas sobre troncos de árboles que dibujan formas humanas, animales y geométricas. Hay que buscar la posición correcta para ver las imágenes conjuntas, un juego divertido en un espacio lleno de magia y misticismo donde los árboles parecen cobrar vida.
Una obra original y diferente creada por Agustín Ibarrola entre los años 1983 y 1985 como una muestra de la relación entre la naturaleza y la presencia humana. Se encuadra en el Land Art. una corriente artística que trabaja directamente sobre el entorno natural, siendo el propio paisaje el lienzo del pintor.
Son un total de 47 obras pintadas en distintos planos de profundidad. Un lienzo que cada visitante puede recomponer a su manera, jugando con las perspectivas. En cualquier caso, también puedes seguir las flechas del suelo, que te indicarán la posición correcta para visualizar la figura formada por la unión de varios árboles.
Ekoetxea Urdaibai es un centro para poner en valor la biodiversidad, y con ese objetivo, y a través de exposiciones y actividades didácticas, informa y educa a los visitantes sobre la importancia de la diversidad biológica y promueve su acercamiento a las personas.
Está ubicado en Busturia, en plena Reserva de la Biosfera de Urdaibai, uno de los lugares con mayor cantidad de ecosistemas de Euskadi y ocupa un singular edificio conocido como la Torre del reloj, que data de 1851. Además, su ubicación es estratégica, se puede divisar toda el área del estuario de Urdaibai,
En Ekoetxea Urdaibai encontrarás un sin fin de actividades para todos los públicos, pero con especial atención en los niños. Todas enfocadas en fomentar el conocimiento y el respeto a la biodiversidad.
Ekoetxea Urdaibai es una iniciativa del Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco, que es gestionado por la sociedad pública de gestión ambiental, Ihobe.
Urdaibai Bird Center es un espacio abierto al público, un gran centro de investigación de aves, un observatorio privilegiado de la marisma, es, en definitiva, un gran museo vivo de la naturaleza, donde las aves marcan el rumbo. Una parada obligatoria para los amantes de la ornitología y para todas aquellas que disfrutan con el espectáculo de la naturaleza.
Está en Gautegiz Arteaga, en el mismo corazón de la Reserva y con unas vistas impresionantes.
Se trata de un centro gestionado por la Sociedad de Ciencias Aranzadi dedicado a la investigación y divulgación científica de las aves, sus migraciones y los hábitats donde viven.
Bañado por las aguas del río Golako y rodeado de uno de los robledales mejor conservados de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, el puente románico de Artzubi es de esos lugares que invitan a para, observar e imaginar otros tiempos.
Además, a través de su calzada se puede seguir explorando la iglesia de Santo Tomás Apóstol y los mejores paisajes de la campiña atlántica.
Sobre el pueblo de Ereño, en un paraje privilegiado de inmejorables vistas, entre los vestigios de sus murallas, su paisaje y sus leyendas, se encuentra la “cima medieval” de San Miguel de Ereñozar. La ermita es visible desde casi todos los rincones de la ría de Mundaka, y desde la cima de Ereñozar es posible distinguir los montes de Durangaldea.
En verano se realizan visitas guiadas a esta cumbre, para revivir una de las etapas más desconocidas de nuestra historia. La investigación arqueológica constata una secuencia histórica desde la Edad Media hasta nuestros días. Sus elementos principales son: una necrópolis con diferentes etapas, una parroquia y un castillo, hoy desaparecido.
La subida es relativamente sencilla, salvo en el último tramo que tiene una pendiente pronunciada. Se encuentra a unos 40 minutos andando desde Ereño. Y durante los meses de verano podrás disfrutar de visitas guiadas al yacimiento.
Es un regalo del mar a esta localidad y más en concreto a los amantes de este deporte. La ola de Mundaka está considerada la mejor ola izquierda de Europa. Kelly Slater, Mark Occhilupo, Aritz Aramburu o Kepa Acero han cabalgado sobre la ola de Mundaka, pero sobre todo son los surfistas locales quienes la disfrutan todo el año.
La ola nace en la barra de Mundaka y termina en la playa de Laida. Puede llegar a alcanzar los 4 metros de altura y los 400 metros de largo. Su forma de tubo, que permite a los y las surfistas contemplar desde su interior toda la costa, le confiere un valor añadido.
En nueve ocasiones Mundaka ha sido sede del Circuito Mundial.
Es el yacimiento arqueológico más importante de Bizkaia, y Patrimonio de la Humanidad. Una cueva que conserva restos de asentamientos humanos de hace más de 14.000 años, medio centenar de pinturas rupestres, y numerosas formaciones de estalactitas y estalagmitas de gran belleza.
La cueva se encuentra en la ladera sur del monte Ereñozar, dominando un amplio paisaje con diversos ecosistemas: encinar cantábrico, campiña, estuario, etc. Las primeras excavaciones arqueológicas se desarrollaron entre 1918 y 1962, y desde 2004 hasta la actualidad, un equipo multidisciplinar trabaja en una nueva fase de excavación.
Aunque no se puede entrar físicamente en la cueva, una visita guiada en 3D permite conocer la cueva, en su totalidad, de una manera absolutamente realista. Una medida para no dañar la caverna y seguir disfrutando de este yacimiento milenario.