Un camino de hierro del siglo XIX perfecto para familias
A finales del siglo XIX se abría paso entre las montañas el ferrocarril de la Vía de la Plata. Robles centenarios salieron de los bosques del Ambroz para crear las traviesas sobre las que se asentaban los raíles, por los que finalmente en 1896 circulaban las primeras locomotoras de vapor, siseando mientras trepaban desde los 400 metros de altitud de Plasencia hasta los 900 de Béjar.
Hoy es un espectacular recorrido con túneles, trincheras, puentes y barrancos, entre bosques y montañas, perfecto para realizar en bici o andando. Hay empresas que hacen remontes para realizarla en descenso, lo que lo convierte en una propuesta perfecta para familias.